Realidades sin nombre

El Teatro de la Monnaie de Bruselas estrena Medúlla, una ópera sobre la herencia musical entre generaciones, con música de Björk y cantada por intérpretes adultos y un coro infantil y juvenil

La sala María Malibrán está extrañamente alejada de su teatro madre, el de la Monnaie de Bruselas, y se aloja en un edificio casi industrial, rodeado de apartamentos y edificios de oficinas en el mismo centro de la ciudad. Hay que callejear para llegar hasta él y, si uno no lo advierte, puede llegar a pasar de largo porque apenas hay un tímido y desgastado cartel en la entrada. Tal distancia lleva al visitante a olvidar la intención primera que le llevó hasta ahí. Por eso, franquear la última puerta y adentrarse en un mundo de tinieblas, tan solo iluminado por unos pocos neones, se asemeja a un viaje extraño que nos coloca ante una realidad sin nombre.

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Foto: Bernard Coutant

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